La relación entre la conducta
operante y su estímulo controlador es altamente probable, sin embargo no se
puede asegurar que la presentación del estímulo garantice que el sujeto
manifieste la respuesta de inmediato a pesar de quedar bien establecido su
control durante el condicionamiento, por el hecho de que las conductas que emiten
los organismos están sujetas a condiciones ambientales que afectarán su
probabilidad de ocurrencia.
La probabilidad de ocurrencia de
una conducta determinada, refiere que tan favorables pueden ser las condiciones
del medio para que sus unidades de respuestas sucesivas se manifiesten. La
tasa de ocurrencia de una respuesta particular
refiere las tantas veces que se manifiesta la misma.
La probabilidad de que se manifieste una conducta será
diferente, dependiendo del tipo de respuesta. Mientras la probabilidad y tasa
de ocurrencia de la respondiente o refleja son predecibles, es todo lo
contrario con relación a una respuesta operante o instrumental, por lo que su
tasa de ocurrencia estará sujeta a la presentación de un estímulo controlador,
y a la latencia o tiempo que pasa entre la presentación de ese estímulo y la
respuesta.
Latencia de
una respuesta, entonces es el principal elemento a tomar en cuenta cuando se
quiere asegurar que la probabilidad de la respuesta sea alta durante la exposición
práctica luego de un condicionamiento. La latencia viene dada después del
condiciomamiento, por lo que es necesario que el experimentador asegure (según
el tipo utilizado simultáneo, demorado, huella...) la frecuencia o tiempo de
aplicación de los estímulos que no debe ser variable, sino más bien fija y
permanente durante y luego del entrenamiento. Veamos:
El experimentador aplica al ave el estímulo pío, pío, pío...
de forma rápida y sin pausas, recibe la respuesta e inmediatamente refuerza. Si
conociendo esto, al experimentador se le ocurre aplicar pío... se
detiene y tiempo después aplica nuevamente pío..., es decir, que tarda un
tiempo entre cada aplicación de las propiedades del estímulo como originalmente
se utilizó, la probabilidad de que ocurra la respuesta disminuye, por el hecho
de que no es el mismo estímulo, y el ave permanece esperando por el estímulo
bajo el cual está controlada su respuesta, ya que esta permanece latente en él
porque ya fue establecida.
La investigación de este hecho identifica algunos factores
muy importantes a tomar en cuenta, cuando tratamos de averiguar por qué la
respuesta se hace menos probable, hasta el punto de caer en poca probabilidad o
ausencia de respuesta:
a) La eliminación o el cambio en la propiedad controladora
b) Las características genéticas heredadas
c) La experiencia previa del sujeto con los estímulos o
sus propiedades.
1. Cuando la eliminación o el cambio en la
propiedad controladora no tiene ningún efecto sobre la conducta, si
las propiedades están separadas, el gradiente de generalización será plano e
invariable de un lado a otro de los valores de esa propiedad. Entonces el
sujeto no atiende a esa parte del estímulo, porque no es el estímulo en sí, es
solo una parte de este (pío, pío, pío eliminado o cambiado
por pío... pío... pío, pausado). En estos casos la respuesta
estuvo controlada por el estímulo original, pero no por cada parte individual o
unidad del estímulo.
2. Las características genéticas heredadas harán
que el sujeto sea selectivo ante ciertos aspectos particulares del medio y al
momento de iniciar un experimento, son de singular importancia, pues sería
menos probable la respuesta cuando se le pide al sujeto ejecutar una acción
para la cual no posee las aptitudes, es decir no está apto para la ejecución
demandada. Por ejemplo, las aves discriminan con más facilidad el sonido, por
tanto la probabilidad de una respuesta al color o la forma, deberá aparearse
con repeticiones junto al sonido. Por ejemplo:
Cuando el experimentador presenta la mano con alimento para que
el ave corra a comer, deberá acompañarlo del sonido pío, pío, pío... será este
el estímulo controlador... el ave lo reconocerá e irá en su dirección... pues
este mismo estímulo tiene el efecto de reforzador condicionado... reforzando la
respuesta final de comer de la mano.
3. La experiencia previa del sujeto con
un grupo de estímulos, uno de ellos o sus propiedades, puede ser la causa de
que responda a uno solo, aun todos estén asociados con el reforzamiento de las
respuestas. Esta regla al parecer establece que una vez que la respuesta ya ha
quedado fija sobre una propiedad del estímulo, el sujeto continuará
respondiendo a esa particularidad, eliminando las demás. Por ejemplo:
Cuando el experimentador utiliza una cadena de estímulos y
respuestas, y decide obviar alguna parte o propiedad de los estímulos ya
establecida como controladora, o agregar uno nuevo, la respuesta del sujeto
puede bajar la probabilidad de ocurrencia, al desaparecer la propiedad
controladora o el estímulo mismo.
La respuesta del sujeto se altera cuando cambia el ambiente de
manera explícita o por contingencia. por ejemplo:
El experimentador por accidente dejó que el gato asustara
a las aves, cuando estas respondieron saliendo fuera de la jaula al abrir la
puerta como siempre lo hacen... ahora, las aves se niegan a salir
de la jaula cuando la puerta se abre.
Tenemos el caso del niño que le gusta ir a casa de los
abuelos todos los fines de semana y jugar con los primos. La casa tiene como
propiedad controladora "es de los abuelos"... los abuelos viajan y el
niño ya no quiere ir, aunque todos permanecen en la casa... cuando se le
pregunta por qué no quiere volver responde: "la comida de mi abuela es la
que me gusta"... La respuesta de ir a "casa de los abuelos"
estímulo controlador, es controlada por las propiedades de dicho estímulo:
comida-abuela-comer.
La manifestación de la conducta operante no es arbitraria y la
ciencia no puede cambiar esa característica, por lo que siempre estará sujeta
su ocurrencia la probabilidad. Esta es una conducta voluntaria y siempre habrá
que esperar a que se produzca, es decir que desde el interior del sujeto se
inicie por la necesidad interna, una respuesta fisiológica liberadora de la
energía capaz de producir una operante. Esto coloca a las operantes bajo los
estimados de la probabilidad, por lo que la respuesta esperada podría ser
altamente probable, medianamente probable, casi probable, poco probable, nada probable
o totalmente improbable. Es aquí donde la ciencia a través de los
condicionamientos logra manipular el ambiente, provocando la necesidad en el
sujeto, para que manifieste respuestas operantes nuevas o incremente las ya
existentes. Esto se logra con los procesos específicos de condicionamiento
respondiente o clásico.
El proceso de moldeamiento consiste
cambiar conductas operantes simples ya existentes en el repertorio de un sujeto
por otras nuevas más complejas. Forman parte del moldeamiento de una operante,
otros procesos de condicionamientos como son:
1.
El reforzamiento
diferencial, el cual define la complejidad de moldear la conducta elegida, y
consiste en reforzar las respuestas deseadas y no reforzar otras que deseamos
extinguir.
2.
2. La adquisición y la extinción, que como
ya sabemos son procesos arbitrarios de los condicionamientos, parte de
cualquier cambio intencional o fortuito en la conducta. La primera, viene como
consecuencia de la conducta, ante la aparición del reforzador, el cual permite
la creación de operantes nuevas o el aumento en la frecuencia de la ya
existente. La segunda, que se presenta cuando una operante deja de ser
reforzada en un momento determinado y no se manifiesta por falta de refuerzo.
Siempre aparecerá luego de la adquisición, pues donde aparece una conducta
nueva o incremento en la frecuencia de la misma, es porque se extinguió la
anterior, varió la frecuencia y/o cambió la experiencia del sujeto con el medio
(ver tema: Adquisición y Extinción de conducta operante).
MOLDEAMIENTO DE CONDUCTA OPERANTE
El hecho de que debemos esperar a que
una conducta operante ocurra para que se pueda reforzar, hace que parezca
imposible crear nuevas operantes. No obstante, la respuesta operante nueva o
que no existe en el repertorio de un organismo, puede ser creada mediante el
proceso de moldeamiento.
Para poder entender como se lleva a
cabo el moldeamiento de una conducta, y como funciona pasemos a considerar
algunos efectos de la presencia o ausencia de reforzamiento frente a una
determinada conducta (ver temas: Reforzador positivo y la actividad,
Reforzamiento y la topografía...).
El reforzamiento diferencial cuya modalidad implica
reforzar y extinguir, son las herramientas de condicionamiento que se utilizan
para crear o moldear conducta operante nuevas o que ya existen en el conjunto
de respuestas que presenta un sujeto. Mediante el reforzamiento y la extinción
se modifican la tasa de frecuencia y la topografía de las respuestas que
componen una operante, llevando a cabo los siguientes pasos previos:
1. Asegurar que el reforzador a
utilizar sea efectivo para el sujeto. Esto se logra privando al sujeto
del reforzador durante un período de tiempo, antes del iniciar el proceso.
2. Enseguida se debe escoger la
conducta exacta que queremos que el sujeto adquiera, cambiarla o implementar la
frecuencia de la misma.
3. Cuál es la secuencia exacta de
unidades de respuestas que se desea implementar.
4. Una vez que hayamos decidido cuál es la
conducta final, comenzamos por reforzar las aproximaciones que se acerquen a
ella.
PRACTICA DE MOLDEAMIENTO
Analizados los principios básicos y procesos
que se utilizan en el moldeamiento de la conducta operante, vamos a ponerlos en
práctica para moldear la conducta de un grupo de aves o pichones de gallina
(pollitos).
La conducta exacta es comer,
y el propósito de nuestro experimento es hacer que realicen una serie de
respuestas en una secuencia de línea recta, desde la jaula hasta la mano del
experimentador y coma del alimento que él le ofrece en sus manos. Esta conducta
rara vez la harían estas aves en circunstancias ordinarias o medio ambiente
natural.
Primer paso.
Establecer una linea base de reforzamiento, este punto a conveniencia del
experimentador, quién dispondrá la frecuencia de aplicación del reforzador
basado en las características particulares de las aves a estudiar.
Segundo paso. Privar de reforzador positivo
(alimento) a las aves. Esto provocará en ellas la respuesta fisiológica de
hambre, lo cual libera suficiente energía para incitar al aumento en la
actividad de búsqueda, por lo que estarán prestas a ejecutar todo tipo de
conducta que las lleve a encontrarlo. No hay que dejar sufrir hambre a las
aves, pero al momento de experimentar con ellas deben tener hambre. El experimentador
ha de estar seguro de que la privación de alimento no sea tan alta que
desmayen, ni tan baja que no se activen en la búsqueda, para dar la respuesta
demandada.
Tercer paso. La actitud de las aves en
búsqueda de alimento, es el momento indicado para que el experimentador
presente los estímulos en el orden previamente establecido y para que las aves
manifiesten su respuesta frente a ellos.
Cuarto paso. Cada respuesta acertada debe ser
reforzada de inmediato, debido a que las aves emiten respuestas adicionales
previas y después del acierto, entre la ocurrencia que deseamos reforzar y la
entrega real o física del reforzador. El reforzamiento inmediato es más
efectivo que cualquier otro (demorado, huella, hacia atrás...) y al reforzar de
inmediato la conducta deseada, se evita reforzar las respuestas mediadoras. Por
ejemplo:
Si deseamos reforzar la respuesta de las aves cuando "se
acercan a la puerta" de la jaula, abriendo la puerta, el refuerzo
debe llegar de inmediato cuando se colocan junto a la puerta. Pues de lo
contrario sería inadecuado si se abre la puerta cuando ya se han alejado de
ella, porque entonces la respuesta reforzada será "alejarse de la
puerta".
La solución práctica al problema de aplicar el reforzamiento inmediato,
consiste en establecer un estímulo discriminativo que funcionará al mismo
tiempo como reforzador condicionado. Los estímulos auditivos y visuales son los
más efectivos. Veamos: utilización de sonido de una campanilla y abrir
la puerta.
El experimentador antes de abrir la puerta de la jaula, suena una
campanilla, abre la puerta y deposita alimento en la entrada cuando las aves se
acercan. Tiempo después, el sonido de la campanilla, hace que se amontonen en
la puerta, esperando que abra. La campanilla previamente neutral, pasa a ser
condicionado. Las aves discriminan que cuando la campanilla suena, hay que ir a
la puerta porque se abrirá. Luego de establecidos estos dos estímulos, no se da
el alimento, pues las aves han de ejecutar otras respuestas antes de la
respuesta final que será comer de la mano del experimentador.
Se suman a estas respuestas, responder al nombre y
caminar en línea recta hasta la mano del experimentador. Para lograr la
caminata en línea recta, basta reforzar las respuestas en esa dirección y no
reforzar direcciones contrarias. A medida que se adquiere esa modalidad se va
dejando de reforzar con alimento, entonces solo se reforzará la respuesta
final, cuando a una distancia prudente, las aves logran avanzar en línea recta hacia la
mano, estímulo final de la cadena de estímulos y respuestas propuestos
desde el principio, e ingiere el alimento.
La aplicación cuidadosa y sistemática del proceso del
moldeamiento aunado al uso de un reforzador positivo efectivo, son suficientes
para enseñar a un individuo cualquier conducta operante para la cual este
físicamente capacitado.
En el trayecto de este experimento, se estudiarán los fenómenos de
condicionamientos en sus modalidades generalización y discriminación,
por decisión del experimentador al compartir el estudio con los miembros de la
familia. Con esto se pretende mostrar cómo se puede hacer acercamiento
emocional entre ellos mientras se unen por un propósito común, lo cual conlleva
reforzamientos generalizad os efectivos, para lograr las respuestas
generalizadas de las aves y del grupo que lleva a cabo el experimento.
Se han moldeado conductas operantes logrando ejecuciones sorprendentes
en animales y personas, ratas y pichones capaces de aprender a jugar ping-gong
y niños de dos o tres años escribir en máquinas de manera aceptable. Aún no han
comenzado a ser explotadas las posibilidades del moldeamiento para desarrollar
las capacidades tanto de animales como de los humanos, pero ha sido ampliamente
demostrada su efectividad en la manipulación de la conducta.
El efecto que sobre la
conducta de un sujeto ejerce la ausencia del reforzador positivo demandado por
necesidad, es elevar el nivel general de actividad en el organismo. Cuando un
organismo es privado de este estímulo, se genera en él un aumento en la
actividad de búsqueda, con el fin de suplir su falta. Por ejemplo, un individuo
que no haya ingerido alimentos, se activa su funcionamiento fisiológico, con la
sensación de hambre, esto lo motiva a buscar que comer, con el propósito de
saciar esa necesidad.
Un sujeto con elevado nivel de actividad, manifiesta su conducta
en dirección al reforzador, accionando de paso algunas otras respuestas que no
son reforzadas directamente al momento de recibir el reforzamiento por la
ejecución de la que en principio se propone, pero algunas de éstas otras
respuestas se incrementan substancialmente, mientras que en otras apenas se
percibe el aumento de su frecuencia. Esto se debe a que en el proceso de
búsqueda del reforzador positivo, el sujeto interactúa con el ambiente, el cual
contiene unidades de estímulos y la conducta ejecutada por igual contiene
unidades de respuestas. Veamos un ejemplo:
Las aves privadas de alimento, buscan activamente con
insistencia en el contenedor, en la jaula, escarbando en cada rincón... de
repente descubren la llegada del experimentador, por el silbido que acompaña la
presentación de la mano conteniendo alimento... entonces, aletean,
pillan, saltan y se amontonan todas en la puerta de la jaula cuando abre, para
salir corriendo y comer de la mano del experimentador...
Como puede notar, la conducta de correr en busca
del alimento, está compuesta por las unidades de respuestas aletean,
pillan, saltan, se amontonan en la puerta, salen corriendo y comen de la
mano. De todas esas respuestas, solo comer de la mano es
la determinada por el experimentador para ser reforzada con alimento. Sin
embargo, cada vez que el experimentador aparece las aves repiten cada una de
las unidades de respuestas que componen su conducta de ir a comer de la
mano. Las demás respuestas son reforzadas por estar presentes al
momento de las aves recibir el reforzador positivo, en este caso el alimento.
Esas unidades de respuestas son reforzadas por casualidad o contingencia.
Por tanto al momento de reforzar la
conducta, el sujeto estará manifestando varias unidades de respuestas, es
necesario ubicar a cuál de ellas queremos incrementar la probabilidad de
ocurrencia, para aumentar su frecuencia. Veamos el ejemplo siguiente.
Si trataremos de reforzar una determinada
conducta manifiesta de un niño, este no solo repetirá esa respuesta, sino que
también repetirá otras unidades de respuestas que estuvieron formando parte de la
secuencia precedente o posterior a la respuesta reforzada:
El niño está intentando dar
sus primeros pasos, se pone de pie apoyando sus manos en la mesa y luego pasa a
la silla, avanza y al no encontrar más apoyo se sostiene en sus pies, logrando
mantenerse sin apoyo unos cuantos segundos y luego cae sentado en el piso.
La madre que observa la escena, se
para de su asiento y festeja con aplausos la conducta del hijo.
Entonces el niño vuelve a intentarlo y
nuevamente se pone de pie apoyado en la mesa, luego en la silla, se suelta y se
deja caer sentado en el piso.
¿Qué
provoca en el niño la repetición de la conducta y toda la secuencia de unidades
de respuestas?
El acaba de recibir un reforzador
positivo como consecuencia de la conducta y la repite, esperando ser reforzado
nuevamente. La repetición de la secuencia conductual se debe a que no sabe cuál
de las acciones que ejecutó es la que ha provocado la alegría y aplausos de la
madre que le han agradado tanto al punto de repetir todas las respuestas.
Preguntamos a la madre ¿cuál es la
conducta que está celebrando?
Ella responde: se puso de pie
por primera vez él solito.
Analizamos en la secuencia de la conducta las
unidades de respuestas:
1. se apoya en la mesa
2. luego en la silla
3. se sostiene en sus pies
4. cae sentado en el piso
Aunque la unidad de respuesta se
sostiene en sus pies, es la que recibe el refuerzo, las precedentes y
posteriores estuvieron presente al momento de la aplicación del refuerzo, por
lo que fueron reforzadas indirectamente o por casualidad.
La ausencia del reforzador positivo da como resultado un
organismo activo, esta propiedad juega un papel importante en el proceso de
moldeamiento de la conducta operante, al tiempo que se hace muy difícil
reforzar la inactividad de cualquier individuo.
Es frecuente la queja de algunas madres relacionada con la
conducta del niño o joven en el sentido de que éste no tiene un comportamiento
adecuado aun reciba la atención a los reclamos que hace. Veamos el caso de un
niño de cuatro años, queja de la madre:
- Ese niño se comporta de manera insoportable, siendo
menor que la hermana pretende dominarla, le quita los juguetes, es acaparador,
no comparte, no atiende a las correcciones que se le hacen, me tira de la
falda, cuando no hago caso a sus exigencias, en fin, nadie puede con
él...
- ¿Cómo es su conducta en la escuela?
- Totalmente lo contrario, no tengo queja.
- ¿Qué hace papá al respecto?
- Nada, se encierra con su computadora a trabajar en su
oficina, y me deja la brega.
- ¿Cuántas veces al día le das un abrazo y le dices que lo
quieres?
- ¿Pero cómo voy hacer eso, si solo da bregas?...
El reforzador positivo se caracteriza por aparecer como
consecuencia de la conducta y aumenta la probabilidad de que se repita la
respuesta reforzada en el repertorio del sujeto en cuestión. Ahora bien, la
magnitud del incremento en la frecuencia de la conducta en cada caso va a
depender de los factores que intervienen en la relación probabilística de la
respuesta con el estímulo controlador, como son la eliminación o el cambio en
la propiedad controladora de la respuesta y la experiencia del sujeto con el
medio (ver el tema: LA RELACIÓN ENTRE LA CONDUCTA OPERANTE Y EL ESTIMULO
CONTROLADOR).
El proceso de reforzamiento como tal,
no solo afecta la frecuencia de las respuestas, sino que también afecta su
topografía. La topografía de una conducta operante se refiere
a la naturaleza de las respuestas que en conjunto la componen, es decir las
unidades de respuestas contenidas en la conducta. Por tanto la topografía
implica lo que es la forma, la fuerza y la duración de
varias respuestas sucesivas.
El reforzamiento modifica la forma
exacta, la fuerza y duración en la secuencia de respuestas, aun cuando cada
respuesta reforzada cuente con una frecuencia equivalente a la operante gruesa,
cualquiera que sea su forma, fuerza y duración particular. Por ejemplo:
La paloma presiona el pedal del
contenedor.
1. En la respuesta presiona el
pedal, se puede apreciar si la paloma ¿utiliza la pata derecha? ¿la
izquierda? ¿levanta las alas? ¿la cabeza arriba?... como ejecuta esa acción, es
la forma de la respuesta.
2. Presiona ¿fuerte o débil?... con
energía, mas o menos fuerte, suavemente... es lafuerza de la
respuesta.
3. La acción de presionar ¿es corta?
¿es prolongada?... presiona rápido y suelta, deja la pata en el pedal cierto
tiempo antes de soltar... es la duración de la respuesta.
Cada vez que se refuerza una variación
de la topografía sea por casualidad o por la estructura del organismo o el
medio que se utiliza, la última topografía será la que predomine. Basados en
esto, si el sujeto emite una secuencia de varias unidades de respuestas con su
pata derecha, cortas y enérgicas donde cada una de ellas es reforzada, la
conducta operante compuesta por estas respuestas, contendrá una alta tasa de
ocurrencias cuya topografía predominante será: presiones con pie derecho,
cortas y enérgicas.
En el ejemplo anterior, el
reforzamiento estableció los resultados para esa topografía particular. Ahora
bien, si deliberadamente manipulamos el pedal, imponiendo unos grados de
dificultad en la presión, dado que es muy fácil que cualquier movimiento leve
es capaz de bajarla, esto hará que la paloma tenga que aplicar más energía para
ejecuciones largas y enérgicas al presionar la palanca. Entonces se habrá
cambiado la definición de la operante.
En la relación de la conducta operante
con el reforzamiento y la topografía, sean las respuestas reforzadas de manera
selectiva en forma fortuita o sistemática, el resultado siempre será el mismo.
En el caso fortuito o por casualidad
decimos que la respuesta ha cambiado, ya que si llegaran a ocurrir respuestas
con una topografía diferente también serían reforzadas. En el caso sistemático
se hizo un cambio a propósito ya que las conductas con otras topografías no
serán reforzadas.
Aun cuando el resultado es el mismo,
la distinción que hacemos es importante cuando se analizan las causas
ambientales de los cambios en la topografía de las respuestas.
Veamos un ejemplo:
El experimentador, espera que
las aves corran en línea recta hacia la mano que contiene el alimento,
- Cuando suena el silbido y la
campanilla, las aves privadas de alimento, saltan y se amontonan en la puerta,
esperando que abra, para salir.
- Se abre la puerta y salen en dirección
opuesta a la esperada.
- El experimentador las encierra
nuevamente, ha de cambiar la topografía de esa conducta. repetirá
sistemáticamente el proceso, hasta lograr que corran en línea recta.
Si el experimentador no establece
previamente el sistema del proceso de condicionamiento que lleva a cabo, con
las respuestas que quiere reforzar positivamente, todas las respuestas emitidas
aun la esperada se reforzarán de manera fortuita. Por tanto es preciso conocer
que la conducta operante, para ser modificada, necesitará del reforzamiento
diferencial, con el cual se refuerzan las respuestas esperadas y no se
refuerzan las no deseadas.
Cuando iniciamos un condicionamiento,
se hace necesario conocer y tomar en cuenta las cualidades propias del sujeto
de experimento. Estas nos ayudarán a determinar cuál es estímulo en cuya
presencia el organismo deberá responder, por lo que es de singular importancia
investigar acerca de cuáles son las características heredadas del
sujeto y sus experiencias con el medio. Las primeras, implican aptitudes
propias de su configuración física e intelectual, las cuales hacen que un
sujeto sea capaz de dar respuestas a ciertas condiciones ambientales del medio
en el cual interactúa, y las segundas se basan en las experiencias que le
aportan a su conducta esas respuestas manifestadas en interacción con el
ambiente. Constituyen estos dos factores importantes herramientas para
conseguir el éxito en la modificación de la conducta de los individuos.
La conocida frase que dice "no le puedes pedir peras al
olmo", se aplica por ejemplo a la mula, descendiente híbrido del caballo y
el burro. Hasta el momento, no podemos hacer que geste, porque genéticamente no
está apta para ello, por consiguiente no puede parir.
Sin embargo luego de un entrenamiento o condicionamiento, sí existen
conductas que los organismos pueden manifestar, aun no estén genética y
físicamente aptos para realizarlas. Los espectáculos circenses están llenos de
animales y personas manifestando conductas extraordinarias para las cuales
supuestamente no estaban aptos en un momento dado, mostrando que ciertas
aptitudes se pueden adquirir o extinguir después de un adecuado entrenamiento.
DISPOSICION HEREDADA DE LA
ATENCIÓN.
Los individuos nacen con ciertas
disposiciones que les hacen posible atender a los aspectos particulares del
medio, es lo permite a un sujeto prestar atención selectiva solo algunos de los
estímulos que se encuentran a su alrededor y ante los cuales es capaz de
discriminar. Así el sonido, el movimiento, los colores y las formas en todas
sus manisfestaciones e intensidades podrán convertirse en los estímulos que
llamarán la atención del sujeto, son estos los aspectos particulares del medio
ambiente los que determinarán su respuesta. La mayoría de los individuos
responden al sonido más que a cualquier otro estímulo, algunos otros son más
proclive a dar respuestas al movimiento y en menor proporción al color y a la
forma. Estos dos últimos han de necesitar experiencias o condicionamientos
previos, para lograr respuestas frente a ellos.
Un ejemplo de esto lo tenemos con el gato, donde el control
selectivo que tiene el movimiento para provocar su atención, prevalece frente a
la total indiferencia hacia el color o brillantez de un estímulo estático, sin
embargo si le condicionamos para que dé respuesta ante un objeto de color
brillante, su atención se dirigirá a este siempre que aparezca en movimiento.
Por supuesto que a pesar de su característica genética de responder al movimiento,
no quiere decir que no se pueda entrenar para que responda frente a un color
estático. Por ejemplo poner su comida en un plato rojo estático y otro blanco,
dejando este último vacío. Encontrar alimento en el plato rojo estático
reforzará su respuesta frente a este color.
Un reforzador adecuado es el aquél que hará que un sujeto aprenda
a discriminar aún no este diseñado genéticamente para dar respuestas a
determinados estímulos. Culturalmente hablando la frase que dice "la
necesidad tiene cara de hereje", refiere muy bien este tipo de
conducta. veamos:
Los estudiantes de análisis de la conducta en una
práctica de moldeamiento con la cual pretenden establecer diferentes
discriminaciones formando una cadena de estímulos y respuestas, esperan que las
aves den respuestas al experimentador, en una secuencia de atender a:
1- al llamado de su nombre, acompañado de un sonido
(campanilla, silbido, chasquido de dedos...)
2- salir cuando se abre la puerta de la jaula
3- discriminar entre dos experimentadores, a cuál de ellos ha
de dar respuesta
4- recorrer el camino que lleva a la mano del experimentador y
5- finalmente comer el alimento contenido en la mano del
mismo.
Las aves son genéticamente aptas para responder al sonido y al
campo visual que contiene su alimento, no así a un nombre particular, salir en
determinada dirección e identificar entre dos experimentadores cuál es su
entrenador propio, así que no recibirán alimentos, si no responden a la cadena
de estímulos y respuestas programadas para ellas. La privación de alimentos es
lo que hará que atiendan a eventos para los cuales no están genéticamente
programadas.
LA EXPERIENCIA PREVIA Y SUS EFECTOS SOBRE LA ATENCIÓN
La experiencia previa del sujeto, hace que entre un grupo de
estímulos, este atienda a uno solo de ellos o a una de sus propiedades, aun
estando todos ellos asociados al reforzamiento de la respuesta.
Esta regla establece que una vez que la atención ha quedado
establecida sobre una propiedad del estímulo, el sujeto continuará atendiendo a
esa propiedad eliminando relativamente las demás propiedades. Por ejemplo, si
un sujeto ha sido entrenado para llevar a cabo una serie de discriminaciones
previas entre diferentes estímulos tomando como base el color rojo de ellos, en
discriminaciones futuras ese sujeto atenderá al color rojo de los estímulos.
Veamos:
A Lola le encantan comprar blusas con mangas largas, pero
alguien le dijo que las de color rosa le sientan estupendas, de todas las
discriminaciones que implican blusas con mangas largas previamente reforzadas,
la propiedad del color rosa reforzada por encima de los otros colores provoca
que ella atienda selectivamente a ese color dentro del grupo de blusas mangas
largas, obviando los demás colores.
Cuando la característica heredada en la atención de un sujeto,
deba ser suplantada por otra que no le es propia, solo deberá ser reforzada en
la dirección del estímulo que se quiere implementar en él.
Veamos:
Colocamos un gato en un ambiente donde el movimiento no tiene
conexión con el reforzamiento, y solo la brillantez de un color está
relacionado con el reforzador, el gato que de forma natural heredada va tras el
movimiento, no prestará atención a este. Ejemplo: Juana dice, mi gato
no caza ratón, estos pasan frente a él y los ignora. El gato de
Juana nunca fue entrenado para cazar, aunque genéticamente está apto para
realizar esa conducta. El medio es responsable de desarrollar o no las
características heredadas de la atención. Es la regla que se utiliza para
domesticar a los animales.
A partir de la regla anterior, se deduce que una vez que se ha
establecido una discriminación, en base a una diferencia relativamente amplia
en relación a una sola propiedad de los estímulos, cualquier otra diferencia de
menor intensidad correspondiente a otra propiedad de esos estímulos que se
trate de introducir, por lo general será ignorada por el sujeto, a menos que se
cambien las condiciones del reforzamiento. Por ejemplo:
Si se condiciona al individuo para establecer una discriminación,
entre una luz brillante y una tenue, y posteriormente se une a esa
discriminación dos sonidos con una pequeña diferencia en la intensidad, el
sujeto dificilmente atenderá a los sonidos, ya que las luces son efectos
visuales que predominan sobre el sonido. Si se eliminan las luces dejando los
sonidos se notará que no logran efectos diferenciales sobre la conducta.
ESTÍMULOS SUPRAORDENADOS
Los estímulos supraordenados son los que informan al organismo
acerca de la propiedad pertinente que es común a un grupo de estímulos. Cuando
un sujeto se encuentra en presencia de un estímulo supraordenado, el mismo le
indica que una determinada propiedad y no otra será a la cual dará respuesta,
por ser la que en el pasado estableció la ocasión de reforzamiento.
Para las personas las palabras constituyen los estímulos
supraordenados más comunes, y la atención hacia ellas hace que las demás
propiedades de un grupo de estímulos no logren efectos sobre la respuesta. Por
ejemplo:
Decimos a alguien la frase "dígame los colores de estas
tarjetas", mientras les mostramos tres tarjetas de colores diferentes
en su forma, tamaño y orden. Con esas palabras captamos su atención
directamente hacia el color de las tarjetas, por lo que el efecto sobre el
sujeto de los estímulos que representan la forma, el tamaño y el orden en que
aparecen será mínimo. Si se le preguntara por algunas de esas propiedades,
aparte del color sobre el cual se atrajo su atención, es probable que no pueda
recordarlas. veamos ejemplo:
El pasajero de un taxi, está acostumbrado a detener
el auto cuando divisa el edificio de lotería, entre un conjunto de edificios de
la zona, discrimina las pictografías que decoran la fachada. Tiempo después el
edificio fue pintado de colores verdes degradados, desapareciendo las
pictografías, el pasajero pasó por alto el edificio, pues las demás propiedades
como el letrero, o la forma del mismo nunca reforzaron su respuesta para
detener el taxi.
Los estímulos supraordenados también controlan las
respuestas de los animales. Veamos:
Se condiciona a un pichón, ante la secuencia de cuatro
combinaciones de figuras blancas con formas de triángulos y círculos colocadas
sobre fondos de color rojo y verde, iluminando la cámara experimental con una
luz amarilla colocada en uno de los costados, solo se reforzarán las respuestas
en presencia de los dos estímulos que contengan un triángulo.
La iluminación general de color amarillo o azul, indica si las
respuestas serán reforzadas en presencia del fondo o de la figura, esto hará
que el ave responda de manera adecuada, pues el color es la propiedad
pertinente que le informa la dirección de su respuesta.
TRANSFERENCIA DE CONTROL DE ESTIMULO
La atención puede ser transferida de un grupo de estímulos a otros
diferentes. Esto se logra mediante el proceso de presentación simultánea de
ambos estímulos seguida de un desvanecimiento de los estímulos que regularmente
controlan la respuesta. Veamos:
La respuesta del ave está bajo el control de la llave.
- El ave pica cuando la iluminación es verde y no
lo hace cuando es roja.
- Deseamos que el control que ejercen los colores sobre la
respuesta de picar sea transferido a unas figuras geométricas. El ave debe
picar sobre un triángulo y no lo hará sobre un círculo.
- Se presenta de manera alterna el triángulo y el círculo, cada
uno en presencia de fondo color gris
- Se refuerzan las respuestas sobre el triángulo y no reforzar
cuando lo haga sobre el círculo.
Un método más efectivo es presentar inicialmente las figuras sobre los
fondos coloreados adecuadamente, el triángulo en fondo verde y el círculo en
fondo rojo y luego por medio del desvanecimiento reducir gradualmente la
intensidad de los fondos. Esto probará que las respuestas de picar pasen a ser
controladas por las figuras.
Si se lleva a cabo un desvanecimiento a un ritmo muy lento casi
imperceptible para el ave, no ocurrirá ningún cambio en la tasa de respuesta en
presencia de cualquiera de los dos grupos de estímulos, figuras y colores.
Veamos un ejemplo:
La madre de dos pequeñas de 2 y 3 años de edad
respectivamente con apego intenso hacia ella, necesita viajar y dejar a las
pequeñas con la abuela, son muy apegadas y ella tiene gran inquietud por el
sufrimiento que pueda causar la separación. El terapeuta
recomienda, que cuando vaya de compras, visite amigos y familiares, deja a las
hijas con la abuela, y que cada vez que lo haga, tarde más tiempo en regresar,
esto hará que aprendan a estar alejadas por momentos, pero al mismo tiempo
sientan la seguridad de que mamá regresará aunque sea tarde. Tiempo después la
madre viajó, incluso un fin de semana, y las niñas no reaccionaron con el apego
acostumbrado, aprendieron a estar separadas de la madre, tanto que quien se
sintió inquieta pensando que las niñas no la querían más fue la madre.
No existe información disponible acerca del momento exacto en que
ocurre la transferencia, si es gradual o repentino, pero el hecho de que
interviene el proceso de reforzamiento continuo en presencia de las figuras y
desvanecimiento del color del fondo en el ejemplo de las aves y la reducción
del apego en el ejemplo de las niñas, establece que la transferencia de
control de estímulos es un fenómeno gradual.
PRECONDICIONAMIENTO SENSORIAL
Algunas veces durante el proceso de un experimento, aparecen
indicios de que la transferencia de control de estímulos se manifiesta sin un
reforzamiento explícito. Este fenómeno de condicionamiento se denomina precondicionamiento
sensorial.veamos:
Tomamos dos estímulos, una luz y un sonido. Los presentamos a un
sujeto de manera simultánea durante varios ensayos. Después de las repeticiones,
se refuerza una determinada respuesta en presencia de uno de ellos hasta que
ese evento se convierta en un estímulo discriminativo efectivo para esa
respuesta. Si se coloca el sujeto en presencia del otro estímulo, se podrá
observar que la respuesta ha quedado bajo el control del segundo estímulo.
Para asegurarnos de que este resultado no se debe a una simple
generalización entre los dos estímulos, se entrena a otros organismos
probándolos de la misma manera, obviando la exposición inicial simultánea ante
ambos estímulos. Por ejemplo:
La estudiante fue entrenada para dar respuesta cuando vea
el edificio de la fábrica de refrescos, detener el autobús diciendo parada... tiempo
después, observa que otros estudiantes, para detener el autobús, dicen "en
la matica", para bajar en su misma parada. Luego de estar expuesta a este
segundo estímulo, ella asume igual respuesta. Ella no fue reforzada a propósito
para esta respuesta pero transfirió su respuesta hacia el control de ese estímulo.
Estos resultados son demasiado complejos, para presentarlos aquí, pero
indican que el precondicionamiento sensorial es efectivo para transferir el
control de la respuesta a otro estímulo pero de ninguna forma, esa adquisición
del segundo estímulo es tan fuerte como la que se produce por los métodos
tradicionales de condicionamiento.
Sin embargo el precondicionamiento sensorial es efectivo para
lograr las primeras respuestas en presencia de un solo estímulo nuevo y esto
podría ser utilizado como base para otros procedimientos más
concluyentes.
LIMITES DEL CONTROL DE ESTÍMULOS
Si bien es cierto que la diferencia en el grado de discriminación
entre un conjunto de estímulos puede llegar a ser muy pequeña, lo es también
que existe un límite mas allá del cual no se puede establecer una
discriminación. Veamos por ejemplo:
La diferencia entre dos sonidos o entre el brillo de dos luces,
puede llegar a ser tan ínfima, que ningún organismo es capaz de discriminar de
forma confiable, aun bajo condiciones muy favorables. Estos límites han sido
estudiados ampliamente por la ciencia de la psicofísica y han quedado
establecidos para una gran cantidad de estímulos y variedad de animales. Sin
embargo, no se puede afirmar que un determinado organismo, no es capaz de
discriminar entre dos estímulos sin antes haber agotado todos los intentos para
lograr esa discriminación. Solo será necesario una demostración de que se ha
establecido esa discriminación para desechar cualquier afirmación de una
supuesta incapacidad. Por ejemplo:
Cuando los estudiantes deciden experimentar con las aves,
expresan que estas genéticamente tienen en su reloj biológico dar
respuesta de ir a dormir cuando el sol está en el ocaso, cosa que no permite
experimentar condicionamientos con ellas después de esa hora. En el trayecto
del experimento de moldeamiento, descubren que sí pueden controlar su
respuesta, aún el sol se haya ocultado.
Es más correcto afirmar, que todos los organismos tienen
capacidades de discriminación que nunca se desarrollan debido a que en el medio
de sus existencias nunca se les ha proporcionado las consecuencias
diferenciales para dar una respuesta selectiva en presencia de estímulos que
poseen muy poca diferencia entre sí. Tenemos por ejemplo, el paladar de un catador
de vino capaz de establecer diferencias entre un vino muy seco y otro menos
seco. Las sagaces ventanas nasales de un fabricante de perfumes para
discriminar entre las fragancias. Los sensibles dedos del experto abridor de
cajas fuertes. La educada vista de un pintor, para establecer la legitimidad de
un Picasso. Todos son ejemplos de capacidades discriminatorias que permanecen
relativamente sin descubrir en la mayoría de los seres humanos.
Los estímulos liberadores,
llamados así por constituirse en liberadores de energía para el organismo, son
el tema a tratar aquí para presentar un nuevo elemento en el conocimiento que
deriva de los condicionamientos. Muy propiamente estamos hablando de los
estímulos incondicionados o evocadores de respuestas en los
individuos sin que estos hayan tenido una experiencia previa con ellos, sin
embargo estaremos enfocados hacia las respuestas incondicionadas o
fisiológicas del organismo ante las necesidades que mantienen la homeostásis
del sistema, por entender que este tipo de respuestas internas, y externadas
por los individuos se convierten en impulsos provocadores de respuestas
operantes. El hambre, la sed, deseo sexual, el dolor, el miedo etc. liberan la
energía suficiente para que un sujeto haga las diligencias necesarias
manifestando respuestas operantes que le ayudan a suplir esas necesidades o
acomodar su situación.
Estas respuestas orgánicas son las
responsables de la motivación o impulso interno del individuo
para sobrevivir al medio ambiente, se suman a éste o lo modifican para su
bienestar.
Cuando tratamos de saber cómo funciona una respuesta operante,
preguntando ¿qué la provoca?
Sabemos según las características de las operantes, que no existe
estímulo previo aparente para este tipo de respuestas, por lo que deberemos
salir del criterio conductista para averiguarlo, ya que bajo
este marco teórico las respuestas en términos de deseos no se aceptan, por
cuanto el mismo exige la observación real y directa de la conducta para su
análisis experimental. Entonces hemos de entrar en el psicoanálisis, que
nos explica la conducta en términos de lo que siente el individuo, sus
sentimientos.
Es aquí donde entran lo que yo llamo respuestas
liberadoras o incondicionadas, que al manifestarse de adentro hacia afuera
del organismo, comparten la doble función según mi criterio de ser respuestas
y estímulos al mismo tiempo, donde el organismo emite una respuesta,
provocada a su vez por la necesidad interna, que no ha sido suplida por el
ambiente externo al sujeto, o por el sujeto mismo desde su propio ambiente. Veamos
un ejemplo para una mejor comprensión la hipótesis expuesta:
"Javier llega a la casa exclamando !que sed tan grande
tengo! y encamina rápidamente sus pasos hacia el refigerador, del cual abre la
puerta, toma la botella de agua, la destapa y bebe con avidez".
Puede observar que todas las respuestas emitida por Javier son
operantes, formando una cadena de estímulos y respuestas fácilmente
observables, que se pueden medir y reproducir:
1. llega a la casa
2. exclama !que sed tan grande tengo!
3. camina hacia el refigerador
4. abre la puerta
5. toma la botella
6. la destapa
7. bebe con avidez
Después de esto, si preguntamos ¿cuál es el estímulo inicial de
esta cadena de estímulos y respuesta, partiendo de su llegada a la casa? no
tenemos forma de decir que fue observado para ser identificado como
factor desencadenante de esa serie de respuestas operantes, sin embargo, si
examinamos cada una de las unidades de respuestas llevadas a cabo por Javier,
la No. 2 es la que nos da la información que buscamos: "Javier tiene
sed", el mismo proporciona la información.
En caso de que no lo hubiera expresado ¿cómo
podríamos saberlo? solo preguntando a él, o arriesgarse a suponerlo, algo que
no es correcto dentro de un análisis conductista en dicha situación. El hecho
de que Javier manifieste que tiene sed, explica que la conducta es fisiológica,
el "siente sed", viene de dentro de él, es una necesidad interna que
le lleva a operar respuestas en busca del estímulo que satisface esa necesidad.
Entonces "la sed" que en realidad es una emoción o respuesta interna
de su organismo ante la falta de ese elemento, también está funcionando como
estímulo que provoca la respuesta operante de "ir al refigerador".
Hasta el momento, todos las opiniones al respecto refieren que una
respuesta es solo eso "una respuesta", por tanto no puede ser
un estímulo. Igualmente en las cadenas de estímulos y respuestas, solo el
estímulo discriminativo asume doble función, la que le es propia y al mismo
tiempo la de reforzador condicionado para mantener unida la cadena. Sin embargo
ha sido fácil establecer aquí la doble función de una respuesta
fisiológica que propicia la ejecución de una respuesta
operante.
Entonces es lógico asumir que una respuesta fisiológica pasa
asumir la función de un estímulo liberador, pues igual que los
estímulos evocadores incondicionados del medio ambiente liberan energía refleja
del organismo provocando las respuestas respondientes, estas respuestas liberan
suficiente energía en el organismo como para provocar conductas operantes.
Observar a un sujeto manifestando una determinada respuesta
operante no nos garantiza saber los sentimientos que acompañan esa conducta,
esto solo es del dominio del sujeto, pero una cosa es cierta, "una
respuesta interna está haciendo las veces de estímulo incondicionado que
impulsa o evoca esa conducta".
Cada vez que llevamos a cabo un
condicionamiento, dos procesos dentro del mismo están contenidos de forma
arbitraria. Son estos: Adquisición y Extinción. Por tanto cuando deseamos
explicar la presencia o desaparición de conductas en repertorio de un
organismo, recurrimos a los principios que rigen su adquisición y extinción.
La Adquisición es un proceso en cual un organismo
incrementa la frecuencia de una determinada respuesta, o adquiere una respuesta
nueva que antes no existía en su repertorio. Este proceso será diferente
dependiendo del tipo de respuesta.
Adquisición de respuesta operante
En la respuesta operante el proceso de adquisición se
manifestará de forma automática, como ya sabemos es el tipo de
respuesta en la que solo basta reforzar una sola vez para que la conducta se
repita o incremente su frecuencia si ya existe dicha conducta en el sujeto. Un
individuo que está manifestando una respuesta operante e inmediatamente recibe
y asume el reforzador por tal ejecución, aumenta la probabilidad de que se
repita dicha conducta, eso automáticamente produce la adquisición. Por ejemplo:
"El perro hambriento anda olfateando siempre en los
contenedores de basura, encuentra alimentos en un contenedor y come, ahora
siempre que siente necesidad de comer, vuelve al mismo contenedor en busca de
alimentos".
Veamos en el ejemplo.
1. El perro emite siempre la conducta de olfatear en
los contenedores de basura, es una conducta permanente en él, existe en su
repertorio de conductas relacionadas con la busqueda de alimentos.
2. El perro encuentra alimentos en un contenedor
y come. El alimento, luego de asumirlo es el estímulo reforzador que
aumenta la probabilidad de que se repita la conducta de buscar que comer en ese
contenedor.
3. Ahora siempre que tiene necesidad de comer, vuelve al
contenedor en busca de alimentos.
Análizamos la conducta del perro ¿dónde se muestra la
adquisición?
- Se incrementó la busqueda de alimento en un
contenedor específico, aunque la conducta de buscar alimentos en los
contenedores ya existía en el perro, ahora:
- Va directamente al contenedor donde encontró
alimentos. Es conducta nueva que no existía en el repertorio de conductas de
olfatear en los contenedores de basura.
Pasemos ahora a la adquisición de respuesta respondiente.
En la respuesta respondiente la aquisición se efectúa
de manera gradual, dado que este tipo de respuesta no es afectada
por las consecuencias que van después de ella, se hará necesario condicionarla
en un arreglo temporal y fijo, apareando el estímulo evocador de
la respuesta y un estímulo neutral que luego pasará a ser
el estímulocondicionado provocador de la respuesta. La tasa de
la respondiente es altamente predecible, ya que bastará presentarle su estímulo
evocador para que se manifieste. conociendo esto, se procede a su
condicionamiento.
Tomemos como ejemplo el siguiente experimento:
1. Celia, al tiempo que enciende y apaga una luz que Luis está
mirando fijamente, aplica una corriente de aire fuerte en los ojos de éste
cuando la luz se enciende y él cierra los ojos defensivamente.
2. Repite este proceso varias veces.
3. En un tercer paso, omite la corriente de aire, y
Luis sigue cerrando los ojos, cuando la luz se enciende. Adquirió la respuesta
nueva de cerrar los ojos frente a luz, cuando ya no había corriente de aire que
le molestara. ¿donde se muestra la adquisición?
"Luis ahora cierra los ojos cuando la luz se
enciende", a pesar de que ya no recibe corriente de aire fuerte
en los ojos
Como muestra el experimento anterior, fue necesario
exponer a Luis varias veces al estímulo evocador 'corriente de aire
fuerte en los ojos' apareado con el neutral la 'luz que enciende' para
lograr la nueva respuesta, lo cual se logró de manera gradual con el
condicionamiento respondiente o clásico.
Pasemos ahora al proceso de Extinción.
Extinción de la respuesta
operante.
Se presentará cuando una respuesta operante deja de ser
reforzada en un momento determinado. Basta que desaparezca el reforzador y se
extinguirá. Aunque la adquisición de esta respuesta es automática o inmadiata
luego de ser reforzada, su extinción es un proceso gradual, esto así porque la
adquisición de esta respuesta es un aprendizaje que permanece internalizada en
la experiencia del sujeto. La eliminación del reforzador, necesitará de tiempo
para que el sujeto advierta que ya no obtendrá más refuerzo para esa conducta
determinada. Tomemos el ejemplo del perro que olfatea en los contenedores de
basura.
1."Un día el perro como de costumbre va al contenedor en busca
de alimento y no consigue comer, porque este está vacío".
2. "Al siguiente día hace lo mismo y no consigue alimento.
Hará lo mismo, en los siguientes días insistiendo sin éxito".
3. "Finalmente desiste, y no vuelve al contenedor".
Se ha llevado a cabo la extinción. Nótese que ahora, adquiere una
respuesta nueva, "No vuelve a ese contenedor". Se produjo
un descondicionamiento, y la conducta vuelve a su estado anterior, es probable
que el perro continue buscando en todos los contenedores nuevamente y no en uno
en particular.
Veamos la extinción de la respuesta respondiente.
Aunque una respuesta respondiente puede llegar a extinguirse, no
es parecido al proceso de extinción operante, ya que este tipo respuesta al no
ser afectada por las consecuencias que van después de ella, es decir el
reforzador, no importa si se refuerza o no, la extinción solo se presentará
ante la ausencia del estímulo que la produce, lo cual es predecible, es decir
su estímulo evocador o estímulo incondicionado. Si se tratara de una
respondiente condicionada, se retira el estímulo incondicionado o evocador
presentando solo el condicionado.Tomemos el ejemplo anterior:
1. Celia retira por mucho tiempo la corriente de aire
fuerte de los ojos de Luis.
2. No importa cuantas veces encienda y apague la luz
o estímulo condicionado, si no aparece la corriente de aire por un tiempo
prolongado, luis no volverá a cerrar los ojos. Se habrá producido el
descondicionamiento desapareciendo la respuesta de cerrar los ojos frenta a la
luz que enciende.
Efectos del proceso de extinción.
La extinción presenta varios efectos en el individuo entes de quedar
establecida la ausencia de la respuesta.
a) El efecto básico de la extinción,
es la reducción gradual en la frecuencia de la respuesta. De
manera implícita, si buscamos extinguir una respondiente condicionada, o el
mismo efecto en una respuesta operante cuando se retira o desaparece el
reforzador. En ambos casos se controla el medio ambiente. Por ejemplo: "...
el perro continua buscando en el contenedor, a pesar de que ya no
encuentra alimentos..."
b) La conducta no desaparece o desvanece inmediatamente. Se
produce un aumento o incremento de la respuesta operante, temporalmente antes
de que empiece a declinar. El organismo insistirá en la busqueda del
reforzador, con frecuencia inucitada. Por ejemplo: "... la insistencia
en la busqueda..."
d) Produce cambios en la topografía de la respuesta. El sujeto que antes
esperaba o buscaba su reforzador, ahora puede desesperarse ante la ausencia del
mismo, si se trata de una respuesta operante. La respondiente, aumentará la
intensidad del reclamo, ante la presencia del estímulo condicionado sin la
presencia del incondicionado. Por tanto, la forma de la conducta se hace más
variable. Por ejemplo: "... ahora el perro patea, vuelca el
contenedor, entra en el ...hasta que finalmente declina..."
c) El organismo, estará expuesto al fenómeno de la recuperación
espontánea, cuando se encuentre frente a los estímulos ante los cuales fue
inicialmente reforzada la respuesta. En esta situación el sujeto recuperará
espontáneamente la respuesta que se suponía extinguida. por
ejemplo:"... el perro al encontrarse tiempo después frente al
contenedor en el que un día encontró alimentos, puede manifestar la respuesta
extinguida y buscar alimentos nueva vez..."
¿Cómo es que entran de forma arbitraria la adquisición y
extinción en los condicionamientos?
Esto es simple, donde se está llevando a cabo una adquisición,
necesariamente aparecerá la extinción, pues donde una conducta nueva
entra a formar parte de el repertorio de respuestas de un individuo, es
porque se ha extinguido la que existía anteriormente. Debe entenderse que tanto
la adquisición como la extinción no son fenómenos de los condicionamientos,
sinó parte de ellos.
Los estímulos controladores de la conducta,
son los eventos ambientales que aparecen antes de la respuesta y la acompañan,
aunque no la evocan directamente, sino que en su presencia la respuesta es
altamente probable. Estos son los mismos estímulos que conocemos como discriminativos,
pero con la característica de que están totalmente establecidos en la
experiencia del individuo a través del condicionamiento operante. Un estímulo
controlador, es detectado por el sujeto, que irá tras él, con el fin de operar
una determinada respuesta que por supuesto será operante. Estos
estímulos pasan a formar las llamadas cadenas de estímulos y respuestas,
por tanto, no actúa solo, sino encadenado a la secuencia de un eslabón de la
cadena que componen un estímulo, una respuesta y otro estímulo, los
cuales el sujeto irá tomando a medida que se condiciona al grupo de estímulos
que lo acercaran a una respuesta final.
Al principio del condicionamiento, el
sujeto asume los estímulos de manera expresa, cuando ya previamente los asocia
con la respuesta. Mas luego, ya asumidos el grupo de estímulos, de forma
inintencional para acomodar su respuesta a su necesidad, irá reduciendo la
cantidad de estímulos, descartando los del principio de la cadena, por estar
más alejados de la respuesta final y asume solo el eslabón más cercano a la
misma. Estos últimos son los que controlaran la respuesta final.
Realmente no todos los individuos son
capaces de descartar una cadena de estímulos y respuestas, asumiendo la cadena,
que lejos de acercar la probabilidad de una respuesta, puede entorpecer la
misma, pues una cadena de estímulos y respuestas, viene a ser un largo camino,
que fácilmente se convierte en laberinto para un sujeto en la fase final del
aprendizaje de una respuesta particular.
Es conocido el chiste de la indicación
de una dirección por un transeúnte a otro que está extraviado:
"... para llegar, solo tiene
usted que cruzar la avenida que está detrás de la segunda calle paralela a la
tercera, atraviesa por debajo del puente, hacia izquierda, para que
luego tome la derecha, frente al edificio del banco del este que se encuentra
frente al hotel, baja las escaleras, sigue por el pasillo, cuente las puertas,
hasta la número nueve, llega al fondo y ahí es!..."
Imagínese que alguien pueda internalizar y fijar en la memoria tantas
respuestas para cada vez que tenga la necesidad de llegar al lugar requerido.
Lo más probable es que obvie un gran número de eslabones de la cadena que
componen la orientación recibida, acomodando su respuesta al eslabón final:
"... yendo directo a la puerta nueve, camina hasta el fondo y ahí
es!..." (¿se ocupó de contar las respuestas a la orientación
recibida por el transeúnte?... inténtelo!). "No por placer, se pide de
favor mostrar el camino más corto para llegar a Roma".
En los experimentos de condicionamiento que buscan
establecer la modalidad del moldeamiento, el cual consiste en cambiar
conductas simples por otras más complejas, los estudiantes tienen que aplicar
una serie de estímulos para provocar respuestas en cadena con el propósito
de moldear una conducta determinada, donde se hace necesario
más de una respuesta, hasta lograr el condicionamiento.
Veamos:
Las aves en la jaula comen de manera simple, solo picotean y
escalvan en un contenedor. Con el moldeamiento se pretende:
"...las aves deben salir de la jaula cuando se abre la puerta,
avanzar en línea recta hacia el experimentador que se coloca a distancia de dos
metros o más, cuando este le llame por su nombre, continuar al escuchar el
sonido de la funda conteniendo su alimento, y parar frente a la mano del
experimentador para comer el alimento que tiene en la palma de la mano..."
Puede notar la cadena de estímulos, que las aves deben asumir
dando respuesta a cada uno de ellos:
1. Abre la puerta (primer estímulo) y sale de la jaula (respuesta)
2. Le llama por su nombre (segundo estímulo) avanza en línea
recta hacia el experimentador (segunda respuesta)
3. El sonido de la funda (tercer estímulo) escucha y continua
(tercera respuesta)
4. La mano del experimentador (cuarto estímulo) corre hacia la mano
(cuarta respuesta)
5. Finalmente come de la mano del experimentador (respuesta final)
Después del condicionamiento (respondiente por supuesto ya que todos
esos estímulos de la cadena son previamente neutrales, y se asociaron con la
necesidad de comer o hambre de las aves) los estímulos pasan a controlar
la respuesta de ir a comer de la mano del experimentador. Llegado el momento,
de manera implícita las aves obviaran algunos de ellos, por estar más alejados
de la respuesta final, por lo tanto los últimos y más cercanos a la respuesta
operante final que es comer, serán a los que las aves darán
respuestas, y tendremos el siguiente eslabón de la cadena de estímulos y
respuestas:
1"... abre la puerta de la jaula, el ave vuela
hacia la mano del experimentador y come".
Con esa respuesta el ave, que adquirió un aprendizaje complejo,
simplifica el mismo, y logra un acercamiento rápido hacia la mano del
experimentador y come su alimento o reforzador como premio a la respuesta
aprendida.
La conducta de los individuos, es exactamente estar sujetos a controles
de estímulos a los que estamos condicionados a lo largo de la vida, simplificar
las labores mejora hasta la misma existencia, es tarea que nos puede ayudar a
carecer de estrés y angustias emocionales, ¿no se ha preguntado alguna vez,
como es que tu compañero de trabajo, tiene tiempo para almorzar con calma y
descansar y usted ya llegó alterado y cansado y sin tiempo para almorzar? es
probable que él simplifique su vida acortando el camino por atajos que evitan
taponamientos del tránsito, llega temprano y con tiempo para trabajar sin
prisas. También es posible que duerma tranquilo, sin preocuparse de que
"pasado mañana" debe entregar un trabajo. Es posible que viajando en
el autobús, mires a tu lado a un señor, que inmediatamente se duerme todo el camino,
para despertar en la estación de su interés, mientras usted permanece pendiente
de cada una de las estaciones, por temor a que se le pase la de suya.
La capacidad para desactivar controles se aprende como todo en
esta vida, pero algunas personas parecen llevar al pie de la letra algunas
máximas populares, "no dejes para mañana lo que puedes hacer hoy"
¿cuál es la conveniencia de ésta frase? ¿acaso sumarle al día de hoy el trabajo
de mañana? si estas condicionado para dar respuestas a cada una de las
obligaciones de hoy, cómo puedes aunarle el trabajo de mañana?
Los estudiantes que estudian diariamente las tareas, tienen
probabilidad de obtener buenos resultados en una prueba final, pues simplifican
el repaso, porque ya el material está aprendido. Los estudiantes que estudian
solo el día del examen, probablemente no tengan buenos resultados, pues el
material no fue aprendido y no puede simplificar o codificar el material recién
leído de golpe y porrazo. Como todo condicionamiento, la adquisición es gradual
o automática dependiendo del tipo de respuesta, por lo que de no lograr el
refuerzo, difícilmemte se repita.
El medio ambiente es el contenedor de los estímulos controladores
de las respuestas de los individuos, pero es el individuo quien los asume,
reconoce, va tras ellos y permite el control. Siempre serán individuales, y
aunque estén relacionado con respuestas de grupos, conservan la individualidad
o particularidad de cada individuo, porque es cada cual quien opera respuestas
de acatamiento, y esta es voluntaria.
Todos los individuos están condicionados,
desde el más pequeño al más grande en la escala filogenética de los seres
vivos. Las plantas, los animales irracionales y racionales responden y actúan
sobre el medio ambiente.
Todos los individuos en todas las áreas de
la vida están condicionadas para aprender y mantener conductas convenientes no
solo para ellos mismos sino también para los grupos de los que forman parte. Así,
un ejército mantiene una disciplina grupal utilizando condicionamientos
generalizados, como por ejemplo, responder el grupo de militares a una voz de
mando dirigida al batallón compuesto por columnas de hasta trescientos o más
hombres.
Las personas estamos condicionadas
desde muy temprana edad. Los padres tienen sus estrategias para establecer la
obediencia en los hijos. Aplican una orden disciplinaria generalizando la misma
para un solo comportamiento a media docena o más hijos.
Yo particularmente recuerdo, como mi madre aplicaba las
reglas para todos, donde las consecuencias por la falta de uno solo de los
hermanos, la recibían todos...no así los premios por la obediencia. Hay muchas
historias en muchas familias donde se aplicaba este tipo de condicionamiento. Veamos
un ejemplo:
"Una vez mi madre dejó a mi hermana mayor a cargo de la
cocina, nuestra cocinera de muchos años, enfermó y debió guardar reposo en su
casa. Ya mi hermana supuestamente sabía cocinar, según ella había aprendido
mirando como lo hacía Caridad nuestra insigne cocinera. Mi madre fue confiada a
sus diligencias pensando que todo, tanto en la casa como en la cocina estaría
bien. A mí no me gustaba la cocina, tenía miedo a quemarme, pues todo lo que en
ella se hace, es con ollas conteniendo aceites muy calientes que salta fuera
cuando echas en ellas los alimentos que pretendes cocinar.
Naturalmente que salí corriendo, cuando mi hermana colocaba
las carnes de pollo para freírlas.
Más tarde regresé atraída por sabroso y rico olor a sazón, para
decirle que me diera a probar, porque vi que ella lo hacía. oh!..mi hermana era
especialista en decir NO!, y siempre con ella era lo que me tocaba. Nuevamente
intenté con un dulce: 'ay... manita linda! anda dame una alita',...no conseguí
nananina!..nada me quedé como dicen 'hueliendo donde guisan, mientras
ella continuaba probando, en cada vuelta a la cocina, la veía hacerlo.
Tiempo después llega mi madre...y muy contenta dice:
hummm!esto huele bien'... vamos a poner la mesa y almorzar, no sin antes
ordenar que nos lavemos las manos antes de comer...mientras colocábamos los
platos y cubiertos, mi madre se encargaba de servir los alimentos en la
cocina... !qué pasó con la carne! gritó mi madre... mi hermana y yo nos miramos
una a la otra...yo no necesitaba ser maga para saber...ella se la comió casi
toda!...con tanta probadera... lo que vino de la cocina hacia nosotras... no lo
he olvidado nunca... es una de las historias familiares que todos disfrutamos
recordar al contarla... !NOS TOCO COMER SIN CARNE !UNA SEMANA!... el
castigo era generalizado, sin importar que solo mi hermana se
comió la carne. El hecho es que todos acatamos las consecuencias sin reclamar,
ni mis hermanos menores, ni yo, delatamos a mi hermana como la culpable de lo
sucedido... porqué hicimos eso?...solidaridad?...temor a ella o a mi
madre?...la verdad es que era la costumbre, defender o respaldar a tus hermanos
en momentos difíciles para ellos...lo contrario era traición, aunque ellos 'se
lo hallan buscado'. En buen dominicano Bozorsmengy Nagy traduciría su teoría de
los lazos invisibles, diciendo 'la sangre pesa más que el agua'."
Este tipo de condicionamiento yo lo utlizo con mis alumnos, cuando
administro una prueba, explico algunas reglas que deben cumplir como grupo,
entre estas: "cuando termine el tiempo límite de la prueba, el
último de la fila será el primero en entregar, si alguien se queda
con el paquete de pruebas más tiempo del requerido, todos estarán nulos en
dicha fila". Los estudiantes se esfuerzan y aseguran de que todos en
la fila cumplan con el mandato, pues a nadie le gustaría que se aplique "pagar
justos por pecadores".
Naturalmente que un condicionamiento generalizado, ha de traer
respuestas generalizadas sean estas de acatamiento o de rechazo, determinado
esto último, por el tipo de reforzador que ocacione las consecuencias. Veamos
otro ejemplo:
Actualmente, las autoridades responsables del servicio de luz en nuestro
país, persigue conseguir respuestas generalizadas de los usuarios del servicio,
con la propuesta siguiente: "si en un determinado sector
todos los clientes cumplen con los pagos mensuales de forma religiosa, serán
premiados con energía permanente, o las veinticuatro horas del día".
Entonces esperan que todos los clientes al igual que mis estudiantes, se
esfuercen y aseguren de que todos en el sector cumplan con los pagos, a la
espera de recibir la recompensa esperada.
Sin embargo, la empresa responsable de proporcionar la energía
eléctrica, se olvida, de que en determinado barrio, existen clientes morosos,
clientes fraudulentos y clientes que cumplen con sus pagos religiosamente.
Entonces en estos casos, el sector no tendrá el servicio permanente y a medida
que menos rentable sea para la empresa, peor será el servicio ofrecido. Aquí
claramente podemos aplicar "que pagan justos por pecadores".
El condicionamiento generalizado aplicado por la empresa, no será
efectivo en algunos casos, sinó que también será injusto con las consecuencias,
por cuanto, no hay lazos invisibles de afectos o parentazgo entre los moradores
de un barrio o comunidad, por lo que nadie tiende a defender o callar la falta
de un vecino moroso o fraudulento, como los hermanos del caso narrado al
principio de este escrito, o el caso de la respuestas de los estudiantes unidos
por un interés común al grupo.
En el caso de los hermanos la madre aplicó el "pagan
justos por pecadores", cuál era la enseñanza que buscaba dar a sus
hijos?...la responsabilidad de todos ellos para cuidar de las cosas de
todos?...que de mayor a menor sean capaces de corregirse unos a otros cuando
algunos de ellos cometen una falta?...la segura probabilidad de que no vuelva a
suceder, porque nadie quiere pagar por lo que no hizo?...
En el caso de los estudiantes, todos son advertidos
previamente de las consecuencias, por tanto es difícil que el condicionamiento
no sea efectivo.
En el caso de las empresas de energía, que pretenden lograr de los
usuarios del servicio eléctrico?...que paguen justos por pecadores?...con qué
objetivo?...que cada vecino de un sector como tal, sea responsable de cuidar de
que todos paguen sus cuentas?...que sean capaces de denunciar al
fraudulento?...está la empresa delegando en los usuarios, la responsabilidad de
asegurar los cobros?...
Si la empresa alega que no darán luz al usuario que no la paga, y
los usuarios alegan que no pagan luz porque no la reciben...quién refuerza a
quién?
Se muestra entonces un posible intento si es que existiera de
un reforzamiento negativo bilateral sin efecto direccional, en
donde tendríamos que acabar preguntando ¿y? pues no lleva a ninguna parte, se
disuelve la interacción de la empresa con los usuarios en una ambivalente
conducta disfuncional pues no existe un efecto práctico o beneficioso de la
empresa para el usuario, ni de éste para la empresa. Ambos se aplican
mutuamente el reforzador negativo. Una situación inverosímil, que muestra un
grado de inmadurez conductual, casi de características infantiles propias del
juego "ambos a dos, matarile, rile, rile", con la
diferencia de que en este juego los niños, logran cambiar la propuesta que no conviene,
por una que sí conviene a "ambos".
El condicionamiento generalizado al igual que los demás
procedimientos específicos, para que sea efectivo, debe contar con todos los
principios que lo categorizan como tal, a saber:
1. Un grupo receptor para
operar la conducta. Las condiciones y las características específicas en el
grupo receptor del estímulo reforzador, debe ser homogéneo,
característica que los une en un propósito común, para recibir el
condicionamiento (como el caso de la madre y los hijos, el grupo de estudiantes
y la profesora). En el caso de la empresa, el grupo es heterogéneo:
los morosos, los fraudulentos y los que pagan sus deudas, esto hace que no sea
efectivo el condicionamiento generalizado, por lo que son reforzados los morosos
y los fraudulentos, con las horas de luz sin pagar y son castigados los que si
pagan, con los apagones por los que no pagan.
2. Una conducta ejecutada. La ejecución repetida de la
conducta es resultado del estímulo reforzador previamente ofrecido o aprendido
en la historia previa del grupo. Un estímulo solo será reforzante para el
sujeto que lo asume como tal, una condición heterogénea en el grupo, dificulta
la respuesta de acatamiento, ya que unos lo asumirán y otros no. Por tanto, el
mandato de generalización cuya característica principal es que va en
una sola dirección, solo será acatada por una parte del grupo
manifestandose un contraste conductual, con los desacatados. En
este caso no es efectivo el pretendido condicionamiento de generalización de
respuestas.
3. La consecuencia de la conducta ejecutada.
Naturalmente que donde estamos implementando un condicionamiento generalizado,
la aplicación del estímulo reforzador, busca que la conducta del grupo se
repita. En un grupo homogéneo el resultado esperado, es altamente probable, no
importa el tipo de reforzador que se aplique (positivo o negativo) contrario al
grupo heterogéneo, la conducta operada por una parte del grupo corre el riesgo
de extinguirse, en una de cualquiera de las direcciones del contraste
conductual, ya que resultaría en un reforzamiento diferencial. Por ejemplo el
caso de los usuarios de la energía que si pagan, podrían dejar de pagar, pues
no hay ventaja para ellos en relación con los que no pagan. Ese sería el
resultado lógico de una generalización de respuesta siempre en la misma
dirección, pagan todos, o no paga nadie.
Los estudiantes de análisis de la conducta en la parte
experimental, realizan condicionamiento generalizado, pues aplican sus
estímulos al grupo de aves experimentales, buscando la generalización de
respuesta. Ellos procuran que el grupo de aves responda al mismo estímulo. Por
ejemplo dar respuesta a los mismos estímulos discriminativos y reforzadores,
para finalmente todas las aves correr a comer de la mano del experimentador.
Ellos utilizan un grupo homogéneo, para lograr una generalización de
respuestas.
Muchas veces los individuos
interpretan los eventos ambientales que ocurren alrededor de la conducta
emitida por ellos, como resultado de la misma. La acción llevada a cabo por el
sujeto en una situación particular, puede inducirle aceptar la responsabilidad
de lo que acontece en el medio al mismo tiempo que opera la conducta en busca
de un efecto particular, sin que ese evento haya sido nunca parte de su
propósito al emitir dicha conducta.
Realmente durante la manifestación de una
conducta, se puede observar y escuchar eventos ambientales que tienen que ver o
se relacionan con una determinada respuesta del sujeto, como una extención de
la misma o por el contrario nada tienen que ver y continuan pareciendo
responsabilidad de la respuesta, por aparecer inmediatamente, acompañandola o
después de ella.
En otros casos, esos eventos a pesar de no iniciar una relación
implícita con la respuesta del sujeto, provocan que él los asuma repitiendo la
respuesta cuando las circunstancias en que se manifestaron por vez primera
reforzaron la conducta, esperando el individuo que vuelvan a ocurrir.
Se pueden distinguir dos tipos de relaciones entre la conducta y
el medio ambiente:
1. Relación dependiente.
2. Relación contingente.
La relación dependiente de la conducta como su nombre
lo indica, implica que cuando la respuesta del sujeto se manifieste, el evento
ambiental que la siga sera dependiente de ella. Ejemplo:
"Lola activa el interruptor de la luz y se ilumina la
habitación".
La conducta de Lola al activar el interruptor, hizo
que la habitación se ilumine, ese evento ambiental que representa la
iluminación, no estaba, y para presentarse, fue necesario que Lola operara la
conducta, el evento pues, es dependiente de la acción llevada a cabo por Lola.
La situación en la que acontece la conducta de Lola, es responsable del evento.
Por tanto se define una relación dependiente entre la conducta y el medio
ambiente de la siguiente forma: Si dada la naturaleza de la situación, el
evento en efecto ocurre después de la conducta. Es decir que debe
presentarse un sujeto emitiendo una conducta y un suceso o acontecer en el
medio ambiente como resultado de esa conducta. La mayoría de las conductas
operantes de los individuos provocan eventos dependientes de ellas en el medio.
La relación contigente entre la conducta y medio
ambiente, se presenta cuando la respuesta de un sujeto se manifiesta y a
seguidas ocurre un suceso en el ambiente que puede ser observado o escuchado,
sin que guarde una intención en la actitud del sujeto, para lo acontecido.
Veamos un ejemplo:
"Lola llega a la casa y al momento que abre la puerta,
falla la energía eléctrica". No existe intención en Lola de que
desparezca el servicio eléctrico al abrir la puerta, es un resultado casual o
pura contingencia. El acontecimiento en el ambiente es resultado de la
casualidad y nada tiene que ver con la situación en la que se manifiesta la
actitud conductual del sujeto. Se define la relación contingente de la
siguiente forma: Si dada la naturaleza de la situación, el evento en
efecto debe ocurrir después de la conducta, pero no por fuerza debe ser así. Es
decir que no necesariamente debió fallar la energía eléctrica al momento de Lola
abrir la puerta.
Existe otro tipo de relación casual entre la conducta y el medio
ambiente, que es una pura contingencia, pues resulta del reforzamiento casual o
accidental de la conducta o actitud del sujeto, en el contexto de la situación
en que se manifiesta la misma. El reforzamiento casual provoca la llamada conducta
supersticiosa. Este tipo de conducta es generalizada en determinados
grupos, pero en su ejecución es individual, es decir que muchas de las
supersticiones son particulares en los individuos. Por ejemplo:
"Cada vez que Juan juega con su palo de billar gana". No
existe ninguna relación entre el palo y la suerte de Juan para ganar el juego,
pero cada vez que lo hace, se asegura de usarlo para ganar. La habilidad de
Juan para ganar, no se la da el palo, pues si alguien quisiera ganar el juego
con el palo de billar de Juan, es probable que no lo logre, aunque Juan asi lo
asegure. Juan, es reforzado de vez en cuando ganando, cuando utiliza su palo de
billar, y esto hace que repita la conducta supersticiosa de usarlo.
"En la temporada de lluvias, los indigenas bailan para que
llueva", quiere esto decir que llueve porque ellos bailan?,
naturalmente que no, si observas bien, cuando bailan los indigenas?...en la
temporada de lluvias!...es lógico que de vez en cuando su baile es reforzado
con lluvias...esto hace la costumbre supersticiosa de que "si bailan
llueve"...Porqué no bailan en otra época que no sea de lluvias?...es
probable que no sean reforzados.
Las conductas de las personas, siempre
seran manifestaciones supeditadas a las dependencias y contingencias. Las
contingencias pueden ocacionar problemas, cuando el evento ambiental
consecutivo a la conducta afecte al receptor de la conducta o al emisor de la
misma, es decir que en una relación sujeto-sujeto-contingencia, ambos
sujetos pueden ser afectados por el evento contiguo a la conducta. Veamos
ejemplo:
"El estudiante en día de examen, llega al aula sin su
uniforme, la maestra le ordena irse a su casa y regresar uniformado, de lo
contrario perderá el exámen. El se marcha de prisa, toma una motora, y en el
trayecto colisiona con un carro... en el accidente, pierde una pierna".
El estudiante del caso, culpa a la maestra por el
accidente en cual resultó afectado. Si analiza la situación, no existe
relación dependiente entre la orden de la maestra y la
colisión donde el estudiante perdió la pierna. El accidente fue una contingencia,
la maestra solo aplica las reglas escolares, violadas por el estudiante.
Entonces la maestra es afectada cuando dice...si no lo hubiera mandado a casa
por el uniforme, no le hubiera pasado esa tragedia... es imposible advertir una
contingencia, eso elimina la culpa o intención.
Veamos otro ejemplo:
"Un vendedor de billetes, pasa cantando los números y
Juan lo detiene y compra uno. En el sorteo resulta agraciado".
El billetero, reclama a Juan parte de lo ganado,
alega que si el no pasa por ahí vendiendo, no lo hubiera ganado. Acaso Juan
ganó la lotería porque un billetero pasó por su casa?...que Juan ganara la
lotería, dependió de la decisión de comprar el billete, a ese
o cualquier billetero que pase vendiendo...Ahora Juan dice...cada vez que
un billetero pasa vendiendo billete le compro y sale premiado, yo gano... que
un billetero casualmente pase cantando números, es suficiente
para que Juan gane la lotería?...de vez en cuando la conducta de comprar
billetes que opera Juan, ha sido reforzada con billetes premiados, lo que lo
lleva a repetir la conducta. En el ejemplo puedes apreciar las relaciones entre
la conducta y el medio ambiente:
1. Dependió -> relación dependiente.
2. Casualmente -> relación de contingencia.
3. Cada vez -> conducta supersticiosa.
CADENA DE ESTÍMULOS Y RESPUESTAS.
Las cadenas de estímulos y respuestas dentro de un condicionamiento favorecen las
conductas de seguimiento, logrando aprendizajes más complejos en los
individuos. Están compuestas por reforzadores condicionados que
previamente fueron asumidos por el organismo como estímulos discriminativos.
Cómo sucede esto?
Un estímulo discriminativo, seguido por otro del mismo tipo luego
de la respuesta que se produjo en su presencia, se convierte en reforzador
condicionado para la siguiente respuesta. A medida que el sujeto realiza las
ejecuciones conductuales frente a cada uno de ellos, se va formando las cadenas
de estímulos y respuestas.
Forman las cadenas una serie de respuestas unidas por estímulos
que actúan como reforzadores condicionados y como estímulos discriminativos.
Veamos un ejemplo:
"El experimentador dice pío-pío y el ave salta en la
jaula, le abre la puerta de la jaula, el ave sale corriendo hacia él, le
muestra la mano con el alimento, y el ave come de la mano".
Tenemos:
- El 1er ED asumido por el ave -> pío-pío
respuesta -> salta.
- Segdo ED "
-> abre
la puerta "
-> sale corriendo.
- 3er ED
"
-> la mano con alimento " -> come.
Tomamos un eslabón de la cadena anterior:
ED
respuesta
ED/RC
- pío-pío ---> Salta
---> abre la puerta.
El llamado pío-pío es el primer
estímulo discriminativo que inicia la cadena, salta es la
respuesta para ese estímulo, abre la puerta de la jaula es el
segundo estímulo discriminativo, del cual pío-pío pasó a ser
reforzador condicionado.
Un eslabón es la
unidad compuesta por un estímulo discriminativo una respuesta y otro
estímulo discriminativo que pasa a ser
el reforzador condicionado para la siguiente respuesta, formando así la cadena
de estímulos y respuestas.
La formación de un reforzador condicionado al igual que el
estímulo discriminativo, es un proceso gradual, donde se necesitaran varias
ocurrencias del estímulo para que se convierta en condicionado adquiriendo las
características del estímulo que le sirvió de base, sean estas positivas o
negativas.
Por ejemplo, el reforzador positivo para el sujeto que tiene
hambre es el alimento ingerido, el cual pasa a ser el estímulo que
sirve de base al dinero, un reforzador secundario positivo, ya
que con este último se compra el alimento.
Teóricamente las cadenas podrán tener cualquier número de
eslabones, pero en la práctica existe un límite, ya que una cadena muy extensa,
provoca la extinción de la respuesta frente al primer estímulo que inicia la
cadena, asumiendo el organismo el siguiente o segundo E.
A medida que se aleja del primer estímulo, el reforzador o
estímulo final de la cadena, van perdiendo efectividad los estímulos del
principio de la cadena.
Tenemos por ejemplo:
Lola va por primera vez a la universidad O&M, toma el
autobús por la calle Independencia, en el camino se asegura de ver la clínica,
la fábrica de refrescos, el semáforo y finalmente dice "parada"
frente al edificio de la universidad.
Tiempo después:
Lola va para O&M, toma el autobús, se asegura de ver el
semáforo y finalmente dice "parada" frente al edificio de
la universidad.
Lola, obvió algunos de los estímulos que aparecían al principio de
la cadena. El sujeto no hace esto de forma explícita o intencionada, sino que
acomoda las respuestas más cercanas al reforzador, luego que ya está
condicionada su respuesta para asistir a O&M.
Cada estímulo es a la vez discriminativo y reforzador condicionado,
los eslabones se sobreponen uno con otro, haciendo que esta doble función sea
la responsable de que la cadena se mantenga unida.
La mayoría de los estudios de laboratorios toman como principios
básicos que gobiernan las cadenas utilizar tres eslabones en sus experimentos.
Una cadena compuesta por lo menos de dos eslabones, la encontraremos siempre
que el organismo emita cualquier conducta para obtener un reforzador primario.
Por ejemplo: "El ave al ver la mano del experimentador,
sube a comer...", "suena el timbre y los niños salen a
merendar". Podemos observar: un estímulo discriminativo y una
respuesta inmediata a él. No hay que olvidar, que el sujeto es quien reconoce
el estímulo y lo sigue, manifestando siempre respuesta tipo operante.